jueves, 11 de julio de 2013

¿Es el agua una desventaja para las mujeres?

Sí.  Nuestro cuerpo consiste más o menos en un 50 por ciento de agua, así que debe pensar en sí misma como un vaso lleno a la mitad.  A fin de evitar que el nivel baje es preciso tomar por lo menos 8 vasos de agua al día.  Mantenernos hidratadas reviste una importancia particular para nosotras las mujeres, porque nuestro cuerpo almacena menos agua que los de los hombres.  Esto se debe al hecho de que las mujeres tenemos menos músculos, los cuales retienen mucha agua, y más grasa.  La consecuencia es que las reservas de agua de una mujer se agotan más pronto que las de un hombre.  Por lo tanto, hay que tener más cuidado en reponer la que se pierde todos los días.  Las mujeres embarazadas o que están amamantando necesitan beber más agua todavía, por lo menos de 10 a 12 vasos diarios.


También hay otras mujeres que necesitan tomar más agua que la recomendada para mantener suave su piel y asegurar el mejor funcionamiento posible de su cuerpo.  Usted dispone de varias formas de determinar si está tomando la suficiente.

Revise su realidad. Usted necesita tomar más de 8 vasos diarios si está enferma, vive en un clima caluroso, pasa mucho tiempo dentro de edificios con calefacción o aire acondicionado, habla mucho en público, o si el tamaño de su cuerpo es más que el promedio.

Beba antes de tener sed.  La sed no sirve para determinar cuándo hace falta tomar agua, porque es posible perder hasta el 5 por ciento de la existencia de agua del cuerpo antes de sentir sed.  A fin de evitar que esto pase puede fijar horas específicas para tomar agua: al despertarse por la mañana, al llegar a la oficina, durante los descansos del trabajo, antes de comer y antes de acostarse.  Si toma un vaso de agua en cada uno de estos momentos se mantendrá bien hidratada en un día normal. Conforme se envejece disminuye nuestra sensibilidad a la sed, de modo que se vuelve aún más importante beber durante el día ya sea que se sienta sed o no.

Aclare las cosas. Revise el color de su orina. Debe estar casi transparente, de un color amarillo tenue.  Si no lo está necesita tomar más líquidos.

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