Algunas mujeres sí se
quedan calvas, pero son muy pocas. Los
médicos especulan que la caída masculina
de cabello es un efecto de la dihidrotestosterona, un producto
secundario de la hormona masculina testosterona. Debido a que las mujeres tenemos poca testosterona,
la calvicie normalmente no es problema para nosotras.
Cuando se da una auténtica caída del cabello, es
decir, una alopecia androgénica, por lo común ocurre en la parte frontal. Una baja en el nivel del estrógeno y un
aumento de la hormona masculina en el cuerpo produce esta condición
genética.
En la mayoría de las
mujeres, la hormona femenina estrógeno ayuda al cabello a crecer fuerte
y sano. Conforme nos acercamos a la
menopausia se reduce la producción de estrógenos y empezamos a sufrir más con
el cabello.
Aunque conserve su color, se
hace más fino porque el folículo (la cavidad que contiene la raíz del cabello)
se reduce de tamaño para cada pelo.
El
cabello tampoco crece tan largo, porque su ciclo de crecimiento se acorta conforme
envejecemos. El cabello de una mujer de
40 años tal vez crezca durante 3 años antes de caerse, mientras que cuando la
misma mujer llegue a los 60 años se le caerá después de 1 ó 1 ½ años.
Es posible que a
cualquier edad las mujeres descubran de vez en cuando un exceso de pelo en el
desagüe de la bañera (tina). No se
preocupe por eso.
Cualquier tipo de
estrés, como el que resulta de un divorcio, una pérdida rápida de peso, un
embarazo, una enfermedad, alguna dolencia o un medicamento, puede producir una
caída temporal de cabello. Esto se llama
un efluvio telógeno, es totalmente reversible y no requiere ningún tratamiento.
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